martes, 12 de mayo de 2015

LA DISPAREUNIA AFECTA MUCHO EN EL COITO-TODO SOBRE SALUD Y ENFERMEDADES

TODO SOBRE SALUD Y ENFERMEDADES

LA DISPAREUNIA AFECTA MUCHO EN EL COITO


El coito doloroso o dispareunia es bastante frecuente en las mujeres ya que produce malestar y dolor que puede ser desde moderado, hasta impedir que se realice la cópula o sea la penetración completa.
Este problema se puede presentar en cualquier momento de la vida, siendo más frecuentes al inicio de las relaciones sexuales, después de un parto o durante la menopausia...


 Generalmente la primera relación coital de muchas mujeres resulta dolorosa y muy incómoda, ya que en algunos casos, cuando el himen existe y está completo, su rotura sumada a una falta de lubricación adecuada, al estrés del momento y a muchas cuestiones culturales que rodean este momento, hacen de ella uno de los momentos más difíciles.

Pero lo que no es normal, es que después de algunas relaciones, en que se supone que la vagina se ha adaptado lo que facilita la penetración, se sienta dolor durante el acto sexual y como este problema es frecuente, los especialistas analizan dos tipos de causas que pueden originar las molestias. Una es la física y en otros casos el problema es emocional y psicológico.

Entre las causas físicas que provocan dispareunia están el herpes vaginal, la vaginitis, la enfermedad pélvica inflamatoria, la endometriosis, en tener el útero desplazado o ladeado, el adelgazamiento de los tejidos vaginales, lo que sucede después de la menopausia o durante la lactancia.

También puede ser ocasionada por una reacción alérgica a los anticonceptivos, a problemas hormonales, a una episiotomía mal suturada o a la cicatriz de una lesión sufrida durante el parto.
Entre los factores emocionales que la provocan están el desagrado a las relaciones sexuales, el temor a un embarazo, la culpa, el haber sufrido abuso sexual durante la infancia, una educación sexual represora o el haber sido víctimas de violación en cualquier momento de la vida, incluso dentro del matrimonio, lo que suele ser frecuente.

El problema de no controlarlo a tiempo e identificar la causa para atenderla adecuadamente, es que el miedo y las sensaciones pueden inducir el desarrollo de un vaginismo, que consiste en manifestar contracciones o espasmos involuntarios de los músculos vaginales, que hacen imposible la penetración y con ello mucho más complicada la relación.
Lo importante es consultar al médico, confiarle abiertamente lo que se siente y los temores, así como los antecedentes en la vida sexual para que pueda dar el tratamiento adecuado, que en algunos casos también requerirá de la ayuda psicológica, dependiendo del origen.